Esta mañana me he ido un ratín al
Salón Creativa de Barcelona. Pensé que no podría ir porque entre semana imposible y el finde se presentaba muy apretadito, pero en el último momento, pensé que iba, aunque fuera una horilla...
Mientras estaba esperando en la cola junto con mis dos amores, el Ratón y el Sastrecillo (ellos se iban al parque y a los caballitos, mientras yo cotilleaba por la feria) veo a mi amiguísima Ingrid. Bieeeennnnn!! Qué coincidencia! Genial, genial, genial...
Hemos visto cosas chulas (ahora os explico en qué he pecado) y hemos hablado, hablado, hablado... Genial, porque siempre con peques a nuestro alrededor da poco tiempo para hablar, hablar, hablar...
Pero no sólo ha habido esta maravillosa coincidencia en esta agitada mañana. Justo cuando nos ibamos en el coche, los tres contentos porque todos nos lo habíamos pasado muy bien, le digo al ratón: -Para, para!! Qué he visto a Isabel, qué es Isabel!!!!
Esto necesita un poco de introducción...
Resulta que trabajé durante 3 años en una casal de ancianos que está muy cerca de la Farga (lugar donde se hace el salón Creativa). Allí los abuelitos iban a jugar a cartas, charlar, leer, aprender ingles, hacer gimnasia, talleres de memoria... Me encantaba ese trabajo, más que un trabajo era un hobby, me encantaba que me explicaran historias vividas o ayudarles a montar cualquier actividad creativa que se les pasara por la cabeza (un día os explicaré algunas cosas que hicieron... ). Bueno, pues había una abuelita llamada Isabel que era tan maja que me traía cada día (sin excepción) la merienda, era en todo su conjunto ENCANTADORA.
Actualmente, siempre que paso por allí (que son poquísimas veces, ya que vivo lejos) entro y saludo. Pero nunca, en 8 años que hace que lo tuve que dejar (que os aseguro que fue durísimo), no había visto a Isabel . Qué alegría! Me había acordado de ella en un montón de ocasiones y ella hoy al verme me ha dicho lo mismo, que sorpresa más genial nos tenía preparada el día.
Bueno pues ahora, después de toda esta historia que me hacía ilusión compartir con vosotras, os explico lo que he comprado....
Esta tela de Spiderman para unos pantalones de pijama del Sastrecillo. He comprado un trocito más del necesario para cortar uno de los Spidermans, ponerle una entretela gruesa de las que se pegan por las dos caras y ponerle una cinta para colgarlo del árbol de Navidad. Sí, ya lo se, muy navideño no es, pero estoy seguro que el Sastrecillo va a "flipar" con su Spiderman navideño. Le podría poner un gorro de Papa Noël, ;-D
Esta tela para hacer un libro del Osito Paddington. Resulta que cuando mi querido ratón Pérez era pequeñajo aprendió a leer con un libro del osito Paddinton, con lo cual cuando lo he visto, he dicho:
-Pá mi!. Voy a explicar un poco más lo del libro de tela, se trata de recortar cada uno de los recuadros a modo de páginas, poner guata en medio y coserlo como un libro. ¿Es buena idea verdad?
En la paradita donde hemos comprado estas telas nos han dado su tarjeta y tienen tienda online, por si os interesa, la tenéis
aquí.
Aparte de estas telas, he comprado dos pares de agujas de dos puntas de 9mm, para hacer un tejijuntas en vivo y en directo con
la petita teixidora. Qué ilusión nos hace... Queremos hacer unos gorros de gnomos para los peques, ji, ji, ji...
Por último, dos hojitas de fieltro. Una de puntitos y una de dinosaurios. Si os interesan, me han dicho que venden habitualmente en el Mercat de Sant Antoni.
Feliz domingo!