Cuando yo era pequeña mis queridas abuelas y mi tía Facu me hacían unos jerséis, vestiditos, baberos... handmade para quitar el hipo. Cuando mi sastrecillo valiente nació decidí que aprendería a tejer para que él tuviera ropita handmade hecha con mucho amor, igual que la que me hacían a mí. Así empezó todo...
Estoy orgullosísima de enseñaros una chaquetita que hice para él hace unos meses. Utilicé una lana muy gruesa con un tacto super suave, no pica nada. La compré en Atelierbcn.
Está tejida prácticamente toda a punto yérsey, sólo hice en la parte de abajo un poco de canalé para que le ajustara un poquito a modo de goma.
Parece un pastorcillo... pero de lo más entrañable...
Una idea estupenda aprender a tejer con ese fin y el conocimiento no ocupa lugar ( pero la lana si)
ResponderEliminarQue feliz me ha hecho ver estas fotos hoy, que he acabado el vestido de Lucía, a ver si me pongo, le hago unas fotos y las comparto...siiiiiiiiiiiiiii, besitos, besitos!!!
ResponderEliminarMuy chula!! Las lanas muy gruesas están de moda!
ResponderEliminarLe queda muy bien, y se ve tan calentito...
ResponderEliminarPreciosa, preciosa, preciosa, si que tiene un punto de montaña total, que se lo da esa lana tan gorda, fantástica y los colores geniales. Al utilizar esta lana también le ha dado un toque más moderno y no tan infantiloide. Me gusta.
ResponderEliminarYo no sé hacer este tipo de chaquetas, me tendré que poner a ello por que me parece genial.
Saludos desde Valencia
Eva
me gusta lo de utilizar lana gordita, más abrigo y más rápido de terminar :)
ResponderEliminar